jueves, 29 de septiembre de 2011

Las mentiras de Rubalcaba


La campaña de Alfredo Pérez Rubalcaba tiene como «leit motiv» presentar al PP como el partido que derrumbará el Estado del Bienestar con sus recortes sociales. Ayer Rubalcaba prometió enmendar dos de los recortes que aprobó el Gobierno del que él participó: la congelación de las pensiones (medida acordada para reducir el déficit en 1.500 millones de euros y que puso fin a 25 años de subida garantizada por ley) y la reducción del sueldo de los funcionarios (3.185.900 asalariados públicos han visto rebajado su sueldo de media un 5 por ciento, y congelado este año en base a la resolución aprobada en mayo de 2010). Pero estas dos medidas que el candidato socialista promete ahora rectificar –desdiciéndose de lo que ha hecho como vicepresidente en un intento desesperado de conquistar a algunos de los desengañados del socialismo– no son los únicos «tijeretazos» aprobados por su Ejecutivo. La lista es larga sólo con tomar como fuente los Presupuestos Generales de 2011 y los efectos del recorte de un 8,2 por ciento en Sanidad; un 8,1 por ciento en Servicios Sociales; un 8 por ciento en Educación; casi un 20 por ciento en Vivienda, suprimiendo las ayudas; y un 5,5 por ciento de fomento del empleo. A continuación figura una relación de recortes del Gobierno socialista del que formaba parte el ahora candidato.

- Prestación por hijo a cargo
La ayuda pasó de 500 a 291 euros anuales para familias con renta inferior a los 11.000 euros. Alrededor de 145.000 ayudas a menores de 3 años se reducen en un 42 por ciento.

- Infancia
Reducción a la mitad de las subvenciones para programas dirigidos a la infancia con mayor riesgo de exclusión.

- Cheque-bebé
Fue eliminado cuando la tasa de natalidad se ha reducido, pasando de 1,46 por ciento en 2008 a 1,38 en 2010. En los seis primeros meses de 2011, unos 235.000 bebés se han quedado sin la ayuda.

- Permiso de paternidad
El Gobierno aplazó la ampliación del permiso de paternidad de dos a cuatro semanas, que tenía que entrar en vigor en enero de 2011 (ley 9/2009, de 6 de octubre). Todos los padres que hayan tenido hijos o los vayan a tener (a partir de enero de 2011) se han quedado sin las 4 semanas.

- Deducción de 400 euros
Su eliminación ha afectado a más de 12 millones de contribuyentes.

- Ayudas a la vivienda
La deducción por compra de vivienda habitual ha sido eliminada. En la práctica implica que todas las familias que hayan comprado una casa a partir de 2011 pagarán de media en el IRPF 1.300 euros más, y deberán dedicar un 6,3 por ciento más de su salario a pagar la hipoteca.

- Alquiler de viviendas
Los jóvenes de entre 30 y 35 años ya no tendrán deducción por rendimientos del capital inmobiliario.

- Dependencia
Aunque se han incorporado al Sistema de Atención a la Dependencia 140.000 dependientes nuevos, hay un tijeretazo del 10 por ciento en los PGE de 2011. Existen 1.449.604 dependientes reconocidos que están esperando recibir una prestación y sólo están siendo atendidos un 50 por ciento de los que han solicitado ayuda o prestación. Además, se ha eliminado el derecho que tenían las personas dependientes a cobrar desde la fecha de solicitud de la ayuda, aunque la administración se retrasase.

- Discapacidad                        
El recorte ha llegado al 80 por ciento en los dos últimos años. Lo que ha afectado a casi 4 millones de personas.
- Inmigrantes                           
Este año ha sido dotado con casi 40 millones menos que en el ejercicio anterior y 140 millones menos que hace dos años. Hay 1.139.200 extranjeros en situación de desempleo.

- Ayuda a los parados
Ha pasado de 426 euros a 400 euros, con un cambio de requisitos para poder acceder a la misma. Todos los parados de 30 a 45 años sin cargas familiares que ya habían agotado la prestación por desempleo han quedado fuera de esta ayuda.

- Ampliación de la edad de jubilación. 
Unos 13 millones de trabajadores españoles deberán jubilarse a los 67 años, el 75  por ciento de los afiliados ocupados actualmente en el mercado laboral. La reforma obliga a cotizar a partir de los 26 años (en la actualidad, hay cerca de 900.000 jóvenes menores de 25 años que no tienen trabajo). Además, se aprobó el aumento de los años de cotización para el cálculo de las pensiones, que pasa progresivamente de 15 a 25 años.

500 euros menos
Rubalcaba está dispuesto ahora a revalorizar las pensiones en 2012. Sin embargo, en su calidad de «número dos» del Gobierno arropó y amparó su congelación este año, lo que supone una pérdida adquisitiva media anual para cada pensionista de 250 euros. A esa cuantía hay que sumar otros 250 euros, que dejarán de consolidarse en sus nóminas en 2012. Por tanto, en dos años habrán visto disminuir sus ingresos en 500 euros de media.