El Partido Popular de Miguelturra quiere matizar las palabras de Román Rivero, alcalde de la localidad, en la rueda de prensa que dio ayer día 22 de febrero en relación a la construcción de la depuradora de Peralvillo. Una vez más ha intentado confundir a la ciudadanía a base de titulares de prensa y de eludir su responsabilidad escudándose tras los técnicos municipales, cosa que el Partido Popular no puede permitir.
El alcalde habló de la naturaleza del proyecto, que fue consignado al Plan E de 2009, pero lo que denuncia el PP no es la necesidad o no de la instalación de esta depuradora, sino el hecho de que se hayan recepcionado unas obras al 100% y que se haya acreditado por parte de los técnicos y del alcalde que así era, cuando cualquiera que pase por Peralvillo puede ver que no es así. El propio Román Rivero dice que la depuradora no se encuentra allí y muchos menos en funcionamiento, con lo que se contradice.
Una vez más vemos con tristeza cómo el alcalde de Miguelturra, cuando es pillado en algo responsabilidad suya, se escuda tras los técnicos, intentando derivar cualquier responsabilidad incluso cuando él mismo reconoce que se mantiene un contencioso con la Confederación Hidrográfica del Guadiana respecto a esta obra. Con esto nos da a entender que conoce perfectamente lo relacionado con la obra cuando firma la recepción.
Respecto al discurso permanente de Rivero acusando al PP de Miguelturra de actuar siempre con intereses electoralistas no podemos más que decirle que el asunto se ha dilatado en el tiempo por las innumerables dificultades con las que se ha encontrado este Grupo Municipal para acceder al expediente de obra de la depuradora. Tanto es así que la primera vez que nos permitieron ver el documento tuvimos que hacerlo bajo la vigilancia del vicesecretario y se nos impidió hacer cualquier copia de la documentación, por lo que tuvimos que presentar una nueva solicitud y esperar aún más tiempo.
El PP de Miguelturra optó por denunciar los hechos en los juzgados el 4 de enero de 2011 para que sean los tribunales los que decidan si el alcalde actuó correctamente o no lo hizo. El señor Rivero puede quejarse tantas veces como quiera, puede dar las ruedas de prensa que se le antojen y mentir una y mil veces pero la verdad sobre este y sobre los otros muchos asuntos relacionados con su gestión que están en manos de los jueces se conocerá tarde o temprano.
Por otra parte querríamos puntualizar que el PP de Miguelturra adoptó la decisión de denunciar estos hechos una vez hubo agotado la vía política sin obtener por parte del equipo de Gobierno socialista de Miguelturra una explicación convincente de por qué se había recepcionado una obra que realmente no estaba hecha.
Está claro que este Alcalde y candidato socialista se encuentra acorralado por culpa de su mala gestión e hipotecado por los 32 años que lleva ocupando la alcaldía de Miguelturra. Es una lástima que tenga que marcharse después de tanto tiempo envuelto en todas estas dudas sobre su gestión.
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